Esta semana ha sido bastante estresante, pero el viernes me dije: "hoy te relajas o te da un chungo, amiga".
Y tanta relajación creo que no es buena. Vamos, como que no he hecho absolutamente nada este fin de semana largo. Que si un poco de sofá por aquí, un libro por allá y te encuentras haciendo un repaso mental del día y dándote cuenta de que ha sido totalmente improductivo. Pero qué gusto, señores.
Pero eso, como todo, tiene sus inconveniencias. En mi caso, el no hacer nada aumenta considerablemente mi sensibilidad. Y si a eso le sumamos el ambiente primaveral y que mi amiga roja decide hacerme su visita mensual sin llamar al timbre, pues apaga y vámonos. En resumen, que he estado todo el fin de semana abrazada a un cojín y con unos lagrimones del tamaño de la Casa Real.
Lo que más pena me ha dado ha sido lo del curso. Este verano tenía previsto ir a Londres a hacer un curso. Que costaba un pastón y medio, pero era un mes y una oportunidad incrédibol. Y la semana pasada había intentado reservarlo por interné sin resultado alguno, por no sé qué de la tarjeta. Y me dije: "bueno, pues arreglas lo de la tarjeta y la semana que viene sin falta lo reservas". Y ahí estaba yo, el sábado por la tarde entrando en la página a reservar. Haz click en el curso, bien. Pero espera, ¿y la opción de reservar? ¿Cómo que Fully Booked? Se me quedaron los ojos como platos, y la boca como al cangrejo de la Sirenita. Cuando después de un minuto asimilé que el curso se me había ido por el retrete, automáticamente se me puso cara de pena y empezó el drama lacrimógeno. Y a ver qué iba a hacer yo sin el curso, con las ganas que tenía de ir. Y por qué no lo habría reservado antes, si es que eres tonta (cabezazo contra la mesa), tonta (cabezazo contra la mesa), tonta (cabezazo contra la mesa).
Después de estar así un rato, me sorbí los mocos, me sequé los ojos con las mangas y me puse a buscar más cursos. Porque yo a Londres me iba sí o sí. Vamos, con las ganas que tenía. Así que buscando encontré otros tres cursos, de una semanita cada uno. Y allí que me voy, eso no me lo quita nadie. Que yo por mis cursos ma-to.
Entre que eso me dejó de bajona, una cosa por aquí y otra por allá, pues me encontré con un estado anímico un tanto blandengue. Luego ya si me presiona la gente para que escriba cosas, pues me sale la vena amorosa y empalago a todo el que me toque. Que cualquier día me dan una colleja así, sin avisar. Por plasta.
Y con tanto amor en el cuerpo me dieron ganas de arreglarme y salir un poco, así que el domingo me puse mi vestido prefe. Que es muy arreglado para ir a tomar unas cañas por la mañana, sí, pero a mí que me preguntaran, que yo tenía respuestas para todos. ¿Eres creyente? Pues mira, es que hoy beatifican al papa y tiene una que ponerse mona para la ocasión. ¿Eres ateo? Pues me lo he puesto porque sí, si quieres te lo explico mientras pinchamos algo en una terracita. Y así.
La foto está hecha después de salir, así que no pretendáis un planchado de tintorería.
Y claro, yo después de los llantos me vuelvo blandita y con ganas de abrazar hasta a los vasos. Bueno, eso de abrazar a los vasos creo que lo tengo siempre, sobre todo si hay bebida dentro. Así que esa tarde Yaiza se aprovechó de mí y me pidió un relato que le había prometido hacía ya una semana. Y luego me dediqué a dar amor a diestro y siniestro.
Creo que a veces lo de estar pastelosa se me nota demasiado al hablar conmigo, tengo que ir a cursos para disimular o algo, porque luego me acribillan a cosas bonitas y me ahogo en babas.
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ResponderEliminarYo que vestido mas preciosísimo! =O
ResponderEliminarTu estas rebuena, no? Ya te vale! ¬¬
Yo necesito alguien cerca que le apeteca dar amor a diestro y siniestro, que estoy con la barrita bajo mínimos (en plan sims, digo)
A ver, que yo venía de escribir un comentario y el Blogger del demonio "no puede llevar a cabo mi solicitud" de publicarlo. Más o menos era asín:
ResponderEliminarUn curso en Looooondres, ¡cómo te envidio! Me alegro que hayas podido arreglar el asunto, tengo ganas de volver a London, a ver si este verano...
La amiga roja que viene sin avisar, cómo te entiendo. Aunque la tengo controlaita, siempre da por saco la joía.
Con lo de la tristeza suprema, lo plasta y las tontás, también te entiendo. Llevaba unos días en plan paranoide y ayer le dije a mi novio "no me quieres, no me echas cuentas, no me no me no me... ofú" y él me contestó con tantas cosas bonitas y tanto amol que ahora me recuerda riéndose cuando hablamos (por cámara, es lo que tiene la distancia) lo tontaca que me puse. Osea que la bobería se ha transformado en pavo adolescente y él se parte el culo. XD
Lo del vestidazo, ojalá pudiera imitarte, pero tendría que ir a alquilar amigos, que los míos gastan agenda de ministro últimamente. Aunque una cosa te digo, una cosa te voy a decir, como mañana no llueva, COMO MAÑANA NO LLUEVA... me planto el vestío de hitana y me voy a bailá sevillanah (que hay fiesta, no confundirse con Feria de Abril pofavó).
Qué alegría esto de tener más de 140 caracteres, oiga. Besos Pati!
Ay, qué ganas de abrazarte.
ResponderEliminarH@n; ¡Gracias! Y de rebuena nada, lo que pasa es que el vestido está sobre un maniquí y luce mucho más ;)
ResponderEliminarMalaka; Qué pena lo de tener un novio lejos, yo también lo he vivido y la distancia es difícil. ¡¿Al final te has vestío y te has ido a bailá?!
Caco; ¡Abrazos a mí, ven! Con esto de estar tan blandurria me vais a acabar tomando por el pito del sereno, ya verás.
La distancia es difícil, pero la llevamos más o menos bien, ya sabíamos que habría cuando empezamos. Hay días que es más duro, pero bueno, luego nos montamos unos planazos, como Heike pero en versión universitaria-i-have-no-money.
ResponderEliminarVaaaaaaaya que si me vestí, salió un solete prechiocho. Pero no bailamos mucho. Tengo unos amigos que se han vuelto un poco monguers en esto del fiesteo o tienen agendas de ministro.
Joder, escribo en plan telegrama con tanta coma y tanto punto. XD
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